Maravillas ocultas de Latinoamérica -2
Latinoamérica tiene lugares sensacionales que ya son célebres en el mundo entero. Atraen turistas de todos los rincones del planeta. Esto se aplica principalmente a sitios como México, Perú, Brasil y las islas caribeñas. Sin embargo, también existen otros parajes encantadores, de los que no muchos tienen idea. Son sitios paradisíacos, que están a la altura de los mejores. Segunda parte del informe con las maravillas ocultas de Latinoamérica.
Cañón de las piscinas turquesas, Guatemala
Es un lugar que desafía la imaginación. Está situado en la zona rural de Guatemala. Se trata de una formación natural, que nace a partir del Río Cahabón. Así toman forma un conjunto de piscinas naturales, dispuestas en forma escalonada y que exhiben aguas de un hermoso color turquesa. El lugar se levanta en medio de un bosque subtropical. Por eso la vegetación que rodea el lugar es verdaderamente exuberante. Un lugar único en el continente.
Islas Los Roques, una maravilla oculta de Venezuela
Es un archipiélago conformado por la isla Gran Roque, 40 cayos y cerca de 250 arrecifes coralinos. El sitio se ha protegido de la mano del hombre y por eso ha sido declarado parque nacional de Venezuela. Sus playas son verdaderamente espectaculares, con una arena muy blanca. Más de cincuenta especies de aves en el mundo anidan allí, al igual que cuatro tipos de tortugas en vías de extinción. El lugar es excepcional para practicar deportes de navegación, así como submarinismo.
Playa de Mompiche, Ecuador
Esta playa es uno de los lugares más hermosos de Ecuador. Está ubicada en la provincia de Esmeraldas. El mar tiene olas de gran extensión, que a veces alcanzan un kilómetro de longitud. Por eso es un lugar privilegiado para practicar surf. El clima es de bosque tropical seco y el lugar tiene apenas unas 150 casas de caña y madera, en donde viven pescadores y promotores informales de turismo. Hay una rica e interesante variedad de especies animales y vegetales. Es un excelente lugar para hacer turismo ecológico.
Oasis de Huacachina, Perú
Huacachina es literalmente un oasis en medio del desierto. Queda muy cerca (a unos 5 kilómetros) de la población de Ica, en el Perú. Forma parte del desierto costero de ese país. El agua emergió de corrientes subterráneas y hoy presenta un color verde esmeralda. A su alrededor hay palmeras y árboles de eucalipto, que hacen aun más enigmático su paisaje. Se dice que las aguas de este lugar tienen poderes curativos, debido a la elevada presencia de sales minerales. El sitio fue muy popular durante los años cuarenta y luego tuvo un periodo de apaciguamiento en las visitas. Hoy es uno de los destinos más exóticos del Perú.
Isla Ometepe, Nicaragua
La Isla Ometepe es un auténtico prodigio de la naturaleza. Está ubicada en el Gran Lago de Nicaragua y es la más grande del mundo de esas características. Alberga dos grandes volcanes, el de Concepción y el de Maderas. Mientras el primero está activo, el segundo se considera extinto. En toda la zona hay un bosque tupido, que es hogar de muchas especies vegetales y animales. Los rasgos de este lugar son en verdad singulares. No por nada estuvo en la pelea por entrar en la lista de las siete maravillas naturales del mundo.
