La ciudad blanca de Belgrado, el resurgir de una guerra
Tenemos que quitarnos de la memoria y el recuerdo, la imagen de la guerra de los Balcanes. Belgrado es una ciudad nueva que ha sabido resurgir de esta mala acción humana, como son las guerras. La ciudad de Belgrado es un nuevo destino turístico y que además es muy barato, en comparación con otras ciudades europeas que son mucho más caras.
Los ciudadanos de Belgrado son personas muy sufridas que han vivido varios conflictos, por lo que en la actualidad son personas sencillas y muy amables que reciben al turista siempre con una sonrisa y que desean que el visitante se sienta como en su propia casa.
La ciudad blanca de Belgrado
Belgrado es la capital de la Repúclica de Serbia y la más grande de todo el territorio de la antigua Yugoslavia. Está situada donde confluyen el río Sava con el Danubio. Es una de las ciudades más antiguas de Europa.
Desde el año 2000, la ciudad volvió a ser centro de atención para los turistas y Belgrado, a través de la TOB (Organización del Turismo de Belgrado) se han puesto manos a la obra para convertir la ciudad en una de las principales ciudades europeas en cuanto a turismo se refiere.
Ocio y vida nocturna
Belgrado es también una ciudad que atrae a numerosos jóvenes de lugares cercanos como Bosnia, Croacia o Eslovenia, que llegan los fines de semana para disfrutar de la vida nocturna de Belgrado, ya que tienen una agitada agenda cultural y de ocio, como bares, restaurantes, discotecas o pubs.
Pero hay algo que llama poderosamente la atención, las llamadas “splavovi”, unas barcazas que son discotecas, bares y restaurantes que están atracados en las orillas del río Sava y Danubio.
Entre los lugares de moda destacan el Academija, un club que está en la universidad de Bellas Artes y es el club de los estudiantes de arte. Otro de los lugares es Skadarlija, que es el barrio bohemio de la ciudad.
De turismo por Belgrado
En la Plaza de la República podremos visitar el Museo Serbia, un museo de arte que posee una colección de 400.000 piezas de arte serbio, que datan desde la edad media hasta la actualidad.
Kalemegdan es una fortaleza que está en la cima de Belgrado y dicen que ahí tuvo su origen la ciudad. Ahora es un bello parque donde hay un zoológico, un observatorio e incluso un planetario. Lo más especial del lugar son las maravillosas vistas a los ríos y a la propia ciudad.
Skadarlija, como hemos mencionado antes, es el barrio bohemio de la ciudad, un lugar muy ambientado con bares y terrazas al aire libre donde podemos escuchar típica música serbia y contemplar los distintos artistas callejeros.
Ada Ciganlija es otro lugar de ocio en Belgrado, se la llama también el mar de Belgrado, porque tiene 7 kilómetros de playa con distintas instalaciones deportivas. Allí tenemos también un trenecito turístico y varios recorridos señalizados, que se pueden hacer caminando o en bicicleta.
En la ciudad blanca de Belgrado hay también palacios como el de la Princesa Ljubica, que fue la antigua residencia privada de la esposa del príncipe Milos. Es de estilo barroco propio de los Balcanes. También está el Palacio Real de Belgrado, que está en la parte alta de la ciudad, que destaca por sus salones con una decoración exquisita, tiene también bibliotecas, jardines y estanques.
