La ciudad balneario de Biarritz, el lugar favorito de una emperatriz
Bearritz fue un pueblo o puerto de pescadores de ballenas, que a partir de la segunda mitad del siglo XIX se convirtió en un destino turístico de la nobleza, gracias a la Emperatriz Eugenia de Montijo, esposa de Napoleón III, que se enamoró de este lugar e hizo construir un palacio a orillas del mar.
A partir de ahí toda la nobleza francesa pasaban en Biarritz sus vacaciones y la ciudad se ha convertido en un importante destino turístico, gracias a sus playas donde son famosas por los surfistas, también tiene un importante patrimonio histórico, museos y fantásticos lugares para ir de compras.
La ciudad balneario de Biarritz
Está situada en el suroeste de Francia, en el departamento de los Pirineos Atlánticos y a 20 kilómetros de la frontera con España. Es una de las principales localidades del territorio francés y está construida en un lugar espectacular entre calas y playas.
En cuanto a la vida de la ciudad es un buen sitio para ir de compras, hay lugares donde comprar cosas típicas de la zona y también otros lugares más “chic” donde comprar joyas o antigüedades. Las mejores tiendas o comercios están ubicados en Place Clemenceau, justo el centro de Biarritz. Si nos gusta los buenos quesos franceses y chocolates, la ciudad es el sitio idóneo.
En el centro histórico podemos comer en los numerosos bares y restaurantes donde las especialidades culinarias son los pescados y mariscos. Algo muy típico de Biarritz son sus casinos como el Casino Municipal y también los bares con música para bailar.
Además de poder disfrutar de sus playas con deportes nauticos, también se puede practicar golf, tenis o equitación.
Lugares que podemos visitar
Una opción si quereis visitar los lugares turísticos de Biarritz es tomar Le Petit Train, un pequeño trenecito que os va a llevar por los lugares más turísticos de la ciudad. Tiene 7 paradas que nos llevará a museos, al casino, al mar o incluso al faro.
Nuestra primera parada turística es al Hotel du Palais, que era el antiguo palacio de la Emperatriz Eugenia y que en la actualidad es un precioso hotel, que se ha convertido en el símbolo indiscutible de la ciudad.
Se han alojado reyes y la alta aristocracia, además aunque no estéis hospedados allí, está permitido entrar para hacer una visita turística.
La plaza más representativa de la ciudad es la Plaza de Santa Eugenia, justo al final de la avenida Grand Plage, está rodeada de terrazas y a pocos metros se encuentra el puerto pesquero, un pintoresco lugar con casitas de madera y pequeñas barcas. También podréis setaros en las terrazas del lugar para degustar un exquisito café.
Nuestra siguiente parada es el Museo Marítimo de Biarritz, donde hay 24 acuarios de peces autóctonos de la bahía de Vizcaya. También se pueden contemplar tiburones en la hora de su comida.
Otros de los lugares que valen la pena visitar es el Museo Asiático, un edificio diseñado por la Emperatriz Eugenia y que alberga colecciones de Nepal, India, China o el Tíbet.
No podemos irnos de Biarritz sin visitar sus playas de arena fina y aguas muy yodadas. Hay un total de 7 playas como la de Barre, les Cavaliers, la Madrague o les Cossaires.