El casco antiguo de Berna, un lugar con encanto que no puedes perderte
La ciudad de Berna es la capital de Suiza, por ello, también esta localidad es un importante centro administrativo, económico y financiero del país. Además posee un rico patrimonio histórico monumental, en especial, lo que se denomina su “ciudad vieja” o casco antiguo, todo un tesoro arquitectónico y urbano de la época medieval, de los más importantes de Europa, que se conserva a la perfección, y por lo cual recibió la calificación de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1983.
Este hermoso y único casco antiguo está construido sobre una pequeña colina, y rodeado por sus tres lados por el río Aare. Alberga una gran cantidad de importantes edificios históricos, como la torre del Reloj, la Catedral o el Palacio Federal. Además destacan sus famosas fuentes del siglo XVI y su conocida gran plaza Bundesplatz. Todo un lugar con encanto que no puedes perderte, y que por supuesto te invitamos a visitar.
Historia del casco antiguo de Berna
La Ciudad Vieja o casco antiguo de Berna fue fundado en el siglo XII por el duque Berchtold V, de la importante casa nobiliaria alemana Zähringen. En el año 1405 se produjo un gran incendio que destruyó la mayoría de edificios del lugar, al estar construidos con madera. Por lo que la ciudad fue reconstruida con edificios de piedra pero conservando todo su estilo medieval.
En el siglo XV se añadieron sus particulares arquerías comerciales en sus calles. En el siglo XVI Berna se convirtió en una importante ciudad estado y de esta época datan sus hermosas y policromadas fuentes, como símbolos distintivos de poder y riqueza. Aunque en el siglo XVIII se restauró una parte importante de este casco antiguo, éste ha sabido conservar en su integridad su construcción original.
Lugares de interés del casco antiguo
La Ciudad Vieja de Berna posee numerosos lugares para visitar y recorrer, desde sus históricas calles, plazas, edificios, puentes, etc. Por lo que vamos a hacer una selección de aquellos monumentos de más interés que no puedes perderte en tu visita a la ciudad.
El “Münster” o Catedral de Berna es un templo protestante de estilo gótico, construido en el año 1421. Destaca por su alto campanario de 100 metros, el más alto del país. Su portal principal está decorado con 217 esculturas que representa el juicio final. Destacan también sus luminosas vidrieras del siglo XV, consideradas las más valiosas del país.
La Torre del Reloj o “Zyglogge” fue construida en el año 1220 y es todo un símbolo de Berna. Desde 1530 esta torre alberga un reloj astronómico y una serie de figuras que se ponen en movimiento tres minutos antes de dar la hora, por lo que es muy común encontrarse a los visitantes esperando para ver todo este espectáculo de movimiento y sonido.
El edificio del Parlamento o Palacio Federal está constituido por tres partes que fueron edificadas entre los años 1852 y 1902. Es uno de los edificios más imponentes de Berna. Destacan en especial por sus cúpulas de cobre y su interior fue decorado por un gran número de artistas nacionales. El edificio está integrado en la céntrica y conocida plaza Bundesplatz que está pavimentada con losas de granito y compuesta por unos 26 chorros de agua.
Las once fuentes del siglo XVI fueron construidas en su mayoría por Hans Gieng. Están coronadas por unas estatuas policromadas de estilo renacentista que representan a diversos personajes. De ellas destacamos la fuente de la Justicia, la fuente de Moisés y la fuente de Sansón.
Imágenes cortesía de Juan Carlos Aceros, Andrea T, Senfwurst y Márcio Cabral de Moura.