Un maravilloso viaje por el Tíbet
Os proponemos en esta ocasión un mágico viaje por el Tíbet, un lugar donde se respira algo diferente que no se puede explicar. Para muchos es una tierra Santa, para otros sólo es motivo de conflicto y ambición. Pero quien visita este fantástico lugar no se queda indiferente.
Los paisajes del Tíbet están llenos de colores, el azul del cielo es muy diferente, el rojizo de las montañas y las verdes praderas son un deleite para los sentidos. Las gentes del Tíbet son amables y hospitalarias, basada en la religión y el amor por los demás y lo más importante y conocido del Tíbet, la gran cantidad de templos, palacios e increíbles estatuas.
Información para un viaje por el Tíbet
El Tíbet es una región del suroeste de China y su capital es Lhasa, está rodeado de las cordilleras del Himalaya que recorre países como Nepal, India o Bután. El Everest tiene una parte tibetana y otra nepalí.
En el Tíbet nacen importantes ríos, es por eso que hay importantes cultivos de trigo, maíz, cebada y otras productos, como patata, arroz, tabaco o la remolacha azucarera. También crecen árboles frutales y una gran variedad de hierbas medicinales. Su gastronomía se basa especialmente en alimentos muy energéticos.
La zona del Tíbet ha sido bastante conflictiva en los últimos tiempos, pero para poder viajar sólo necesitas un visado chino y un permiso de entrada al Tíbet. Este permiso sólo se consigue en las agencias de viajes, contratando un tour organizado y un guía.
Un recorrido por el Tíbet
La primera parada de nuestro recorrido es al palacio de Potala en Lhasa, la residencia del Dalái Lama. Está situado a una altura de 3650 metros en la montaña Hongshan y tiene una extensión de 410.000 metros cuadrados. Su belleza es tal, que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
El Palacio Blanco es donde habita el Dalái Lama, que cuenta con habitaciones, salones, oficinas, seminario y una casa de imprenta.
También en Lhasa encontramos el Monasterio Sera, que está catalogado como una reliquia cultural nacional de China. Allí se debaten las doctrinas budistas y los turistas pueden participar de oyentes. En este monasterio tiene lugar el festival tradicional más importante del Tíbet, el Festival Shoton, que se celebra cada año en el mes de agosto.
Yerpa es un conjunto que está formado por un monasterio y por varias cuevas antiguas de meditación, las cuales albergan unos 300 monjes. Es un lugar muy reconocido del Tíbet y allí encontramos santuarios y ermitas en sorprendentes acantilados.
El Museo del Tíbet está situado en Lhasa y fue inaugurado en el año 1999. Allí se encuentra la colección permanente de la historia y cultura del Tíbet. La arquitectura del exterior mezcla el diseño moderno con el tradicional. Está compuesto por jardines, salas de exposiciones y oficinas administrativas.
Las salas del edificio están divididas por zonas como la zona de la prehistoria, historia política, artes culturales o etnografía.
Entre las cadenas montañosas que debemos destacar del Tíbet son el Monte Kailash, la cordillera Kunlun o la cumbre Shisha Pangman.