Tradiciones de año nuevo en el mundo
En todas las culturas del mundo el cambio de año tiene un significado especial. Se trata de un evento que es asumido como el final de un ciclo y el comienzo de un nuevo tiempo. Por eso es en Año Nuevo donde todo el mundo se fija propósitos de mejoramiento y cambio.
También es una ocasión para llamar a la buena fortuna. De ahí que haya cientos de tradiciones en el mundo para invocar la buena suerte o atraer buenos augurios. Algunas de estas costumbres han traspasado fronteras y hoy se practican en el mundo entero sin tomar en cuenta su origen.
Historia de la celebración
El cambio de año se conmemora desde hace 4 mil años. Los primeros en celebrarlo fueron los babilonios (en lo que hoy es Irak). Sin embargo, antiguamente identificaban el cambio de año con el final del invierno y el comienzo de la primavera, en donde todo reverdecía.
El calendario fue modificado en Roma, en el año 153 a.C. Desde entonces se estableció que el nuevo año comenzara el 1 de enero, aunque no tuviera relación directa con algún evento astronómico o agrícola. En realidad fue una estrategia de los gobernantes para ampliar sus mandatos.
Los países occidentales adoptaron la celebración hace apenas cerca de 400 años. En un comienzo la iglesia veía las festividades de Año Nuevo como un ritual pagano y por eso las prohibió. Pasaría mucho tiempo antes de que hicieran coincidir esta fecha con las de los grandes eventos católicos, como la Navidad y la Fiesta de Reyes. Fue entonces cuando se adoptó en casi todos los países occidentales.
Las doce uvas
En muchos países se acostumbra a comer doce uvas, durante los primeros doce segundos del nuevo año. Se busca que cada uva entre a la boca en el mismo momento en que suenen cada uno de las doce campanadas que anuncian el comienzo del año siguiente.
La leyenda dice que este ritual traerá suerte para cada uno de los doce meses siguientes. Se trata de una tradición que tuvo origen en España y luego se extendió a todos los países de Latinoamérica.
Se sabe que este ritual se practicó desde el siglo XIX y que tuvo lugar debido al excedente de frutos que se producían en los viñedos de Alicante y Murcia. Hoy en día es practicado en varios países europeos también.
Prendas de color amarillo
Se trata de una tradición que tiene sus antecedentes en los países orientales y que revela el origen pagano de estas festividades. En China, Taiwan y Corea, entre otros, existe la superstición de que la ropa interior de color amarillo atrae “las buenas energías”.
La costumbre fue adoptada en occidente como ritual de Año Nuevo. Según la creencia, estas prendas atraen la buena suerte y aseguran la felicidad. En los países latinoamericanos se dice que lo mejor es usarla al revés y ponerla al derecho después de la media noche. Aseguran que el efecto es más fuerte cuando la prenda llegó como un regalo y no a través de una compra.