El Palacio Güell de Barcelona, una obra de arte del genial Gaudí
Hoy vamos a visitar uno de los palacios más espectaculares y bellos de Barcelona, construido por el famoso arquitecto Gaudí. Este palacio, como no podía ser menos, expone el marcado estilo único y modernista del autor, en la que a veces se conjugan otros estilos tan variados como el árabe hispánico o variaciones del lejano oriente.
Hablamos del Palacio Güell de Barcelona, una obra de arte del genial Gaudí que de seguro te va a encantar y mucho. Por ello te invitamos a realizar con nosotros este emocionante recorrido, en el que empezaremos por su historia.
Historia del Palacio Güell
El Palacio Güell fue un encargo del político e industrial Eusebi Güell i Bacigalupi, primer Conde de Güell. En el año 1886 quiso contar con los servicios del su admirado Gaudí para la construcción de su palacio residencial, las obras terminaron al completo en el año 1890.
En el año 1944 el palacio fue adquirido por la Diputación de Barcelona con el compromiso de dedicarlo a funciones culturales y no modificar ninguno de sus elementos. El edificio fue restaurado en varias ocasiones y conserva su mobiliario original.
En el año 1969 el palacio fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional y en el año 1984 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Características del Palacio Güell
El Palacio Güell se distribuye por 2850 metros cuadrados de superficie. Se encuentra dividido en sótano, cuatro plantas y azotea.
Para su edificación Gaudí contó con un complejo y experimentado equipo técnico, entre los que se encontraban varios ayudantes arquitectos, así como el decorador Francesc Vidal i Jevellí, los forjadores Joan Oñós, Salvador Gabarró y los hermanos Lluís y Josep Badia i Miarnau, los ebanistas Antoni Oliva, Julià Soley y Eudald Puntí, y los marmolistas hermanos Ventura.
Además de pintores como Aleix Clapés, Alexandre de Riquer y Ramon Tusquets, y también de los escultores Joan Flotats y Rossend Nobas.
En cuanto a su impresionante fachada comentar que está realizada en piedra calcárea y que cuenta con varias entradas, siendo las principales de amplias dimensiones y están compuestas por arcos de forma parabólica, también destacan por las hermosas rejas que las forman.
Entre las puertas se halla un elemento muy llamativo, como es el escudo de Cataluña en hierro forjado y un yelmo con el Ave Fénix.
En cuanto a su interior nos resultará espectacular, entre los elementos más destacados comentar su grandioso recibidor, como punto central del edificio y que está compuesto por una imponente doble cúpula.
También es admirable la sala de visitas realizada en madera de roble y decorada con pan de oro, además de otros ornamentos, como vidrieras y grabados que representan personajes de las obras de Shakespeare.
Otra de sus salas más famosas y valiosas, es su Salón Central que llama la atención por su rico mobiliario y obras de arte de gran valor.
No podemos olvidarnos de su llamativa azotea, que lejos de ser un elemento meramente funcional y menos accesible al público por su localización, resulta toda una obra de arte en la que se han cuidado todos los detalles, y muestra una decoración de fantasía, en la que cobran vital importancia sus seis deslumbrantes y curiosas chimeneas realizadas en cerámica, vidrio, mármol y porcelana, al más puro estilo Gaudí.
Imágenes cortesía de Amadalvarez, FRANCIS RAHER, gandalf3007, Turol Jones, un artista de cojones y calafellvalo.