El bello castillo de Racconigi en Italia, toda una obra de arte
En nuestro recorrido por el noroeste de Italia encontramos una hermosa localidad que nos sorprende por el imponente castillo por la que está presidida, y que le otorgan un aire majestuoso y solemne. Nos referimos a la ciudad de Racconigi y su castillo homónimo, toda una obra de arte Patrimonio de la Humanidad.
El castillo de Racconingi presenta una arquitectura impresionante y suntuosa y su interior no lo es menos, sus fastuosas salas contienen una decoración rica en obras de arte de todo tipo, además de su espectacular parque o jardín. El motivo de todo ello es que fue construido para residencia de la Casa Real de Saboya, por lo cual fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1997.
Conoce el castillo de Racconigi
El castillo de Racconig se halla en la plaza Carlo Alberto de la localidad italiana homónima, en la provincia del Cuneo de Piamonte.
Aunque el castillo existe como fortaleza desde el siglo X, fue en el siglo XVII cuando la dinastía Saboya -Cariñano tomó posesión del castillo– realizó una amplia reforma y transformación de mano del genial arquitecto Guarino Guarini.
Durante el siglo XVIII se renovaron y decoraron las habitaciones interiores y en el siglo XIX se volvió nuevamente a ampliar, esta vez por el arquitecto Ernesto Melano, quien añadió los dos edificios laterales conectado al edificio central y un nuevo tramo de escaleras.
Como dato histórico señalar que en este castillo nació el último rey de Italia, Humberto II en el año 1904, quien además enriqueció, más si cabe, este excepcional conjunto con más de 3000 pinturas y un archivo de documentos importantes.
El palacio es un edificio muy bello, digno de un cuento de príncipes azules. Sus salas están repletas de obras de arte en pinturas, esculturas, mobiliario y todo tipo de decoración. De todas las salas que lo componen destacamos las siguientes:
- El hall de entrada. Esta sala destaca por su estilo neoclásico, y su imponente color blanco plateado. Fue renovada por el arquitecto Giovanni Battista Borra en 1757. Está compuesta por nichos en sus paredes que alberga diferentes estatuas relacionadas con los Trabajos de Hércules. En la parte superior de las paredes se hallan representaciones hechas con estuco, obra de Bolina y Lombardi. El techo está pintado con una técnica de trompe l’oeil. En el salón hay jarrones chinos con decoraciones de esmalte, que datan de principios del siglo XIX.
- La sala de Recepción es una de las más lujosas del palacio, destaca sobre todo el color dorado, especialmente en el mobiliario. Los símbolos del rey como los leones y sus iniciales están en todo sus enseres. Impresionante resulta la lámpara de araña de cristal de Bohemia en el centro del techo, además de sus pinturas realizadas por Palagi.
- El Salón de Diana es obra del arquitecto Borra en el siglo XVIII. Giuseppe Bolina realizó la decoración con estuco de medallones en las paredes que representan el mito de Diana, diosa de la caza. En el techo cuelga una hermosa lámpara araña de cristal de Murano. Destacan también las dos chimeneas de mármol Valdieri de Guarini en los lados de la habitación.
El parque del castillo de Racconigi
En la zona norte del castillo se encuentra un gran parque, diseñado en el siglo XVII por el parisino André Le Nôtre, quien también diseñó los jardines de Versalles.
En el siglo XVIII la princesa Josephine de Lorraine, con la colaboración de James Pregliasco, transformó una parte del parque en el jardín “Inglés”.
En el siglo XIX se creó el parque inglés de Carlo Alberto, hecho por el jardinero alemán Xavier Kurten, formado por caminos serpenteantes entre grandes extensiones de prados y bosques, además cuenta con lago, isla, puentes, ruinas, cuevas, edificios pintorescos, etc.
Imágenes cortesía de Eric Borda, Alessandro, Claudio Giannone, Marco Segato, Geobia, Alessandro y Simona.