Visitar Port Royal, la ciudad de los piratas
La ciudad de Port Royal está ubicada al sureste de la isla de Jamaica, en el mar caribe. Fue fundada por británicos en 1656. Durante el siglo XVII fue capital de Jamaica, el puerto más activo de las colonias británicas, y un nido de piratas y corsarios que bajo la protección de la corona inglesa saqueaban a los barcos españoles y franceses. Hoy en día, al visitar Port Royal vemos que ya no tiene ni por asomo aquella relevancia comercial o política, sin embargo, la legendaria historia de la ciudad tiene suficiente encanto como para atraer cientos de visitantes cada año.
Durante finales del siglo XVII, la ciudad de Port Royal obtuvo tanta fama que se ganó el apodo de “La ciudad más perversa del cristianismo”. Su ubicación en el centro del Caribe y la bahía natural que les permitía guardar y reparar gran número de barcos, lo convirtió en el lugar indicado para ser sede de todas las operaciones piratas del caribe.
En un relativo corto periodo de tiempo, en Port Royal se establecieron piratas famosos como Bartholomew Roberts, Roche Brasiliano y John Davis. Desde esta ciudad Henry Morgan atacó Panamá, Portobelo y Maracaibo.
La Corona Británica fomentó durante décadas la concentración de piratas y corsarios en esta ciudad. La mayoría de sus habitantes se dedicaban a la Piratería, y tanta era la riqueza que todas las transacciones se hacían con monedas de oro, algo que en aquel entonces estaba reservado exclusivamente para la nobleza y la burguesía.
El florecimiento de la ciudad se vio detenido con el fuerte terremoto 1692, que en aquel tiempo fue señalado por muchos como “un acto de Dios para acabar con la ciudad llena de pecadores”. El tsunami que se provocó hundió dos tercios de la ciudad en las aguas del Mar Caribe, sin embargo, los edificios no fueron destruidos y algunos yacen intactos bajo las aguas. Desde entonces, toda la actividad mercante se trasladó a la Ciudad de Kingston.
Los vestigios de Port Royal
Hoy, la ciudad de Port Royal tiene aproximadamente 2.200 habitantes, y es sólo una parte de la gran ciudad que llego a ser. Sin embargo, quedan muchas cosas que hacer y ver, y muchas parte de la historia que repasar.
Al visitar la ciudad, es casi un requisito visitar el “Charles Fort”. Una fortaleza fundada en 1650 para defender la ciudad. Aunque en sus 250 años de historia nunca fue atacada. También se puede visitar la iglesia anglicana construida en 1726, para sustituir a la que fue destruida por el terremoto. Esta, es una de las construcciones hechas en uno de los intentos fallidos de reconstruir la ciudad luego del terremoto.
En el museo Arqueológico de Port Royal y el museo Histórico, cuentan con una colección de objetos utilizados por los habitantes de la ciudad rescatados de las aguas. Los visitantes pueden ver de una forma muy íntima cómo era vivir en Port Royal durante el siglo XVIII, llenos de piratas, ladrones, mujeres de la mala vida, cantineros, etc.
Imágenes cortesía de Christian y Sergio Velasco.