La ciudad de Pompeya resurge de las cenizas del Vesubio
Pompeya fue una ciudad de la antigua Roma fundada por los oscos, fue considerada una poderosa ciudad, con palacios, monumentos, jardines y calles con calzadas. En el año 62 sufrió un terremoto que destruyó varios lugares de la ciudad.
Pero lo peor estaba por llegar, cuando en el año 79 tuvo lugar la erupción del volcán Vesubio, enterrando por completo la majestuosa ciudad de Pompeya entre gruesas capas de cenizas.
Fue en el siglo XVIII cuando un ingeniero español inició las excavaciones, sacando a la luz la antigua ciudad romana, convirtiéndose así en uno de los principales destinos turísticos de Italia.
Actualmente la ciudad de Pompeya forma parte del Parque Nacional del Vesubio junto con Herculano y la Torre Annunziata, declarándose todo el conjunto Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Dónde está la ciudad de Pompeya
Esta antigua ciudad de Roma está situada junto a Herculano en la región de Campania cerca de la ciudad de Nápoles, Italia.
Hay varias formas para llegar a esta impresionante ciudad, una de ellas es contratando un tour en autobús desde Roma con 12 horas de duración.
También se pude ir en tren desde la estación de Termini en Roma con destino a Nápoles y una vez allí tomar la línea Circumvesuviana hasta Pompeya.
Qué podemos ver
Pompeya era el lugar de vacaciones de los romanos ricos, por su clima, el paisaje y la belleza de la ciudad. En la actualidad está muy bien conservada gracias a que fue sepultada por las cenizas. Entre los lugares mejor conservados podemos destacar:
– El Foro construcción de planta rectangular, rodeado por tres de sus lados por una columnata de doble altura y por el otro lado el Templo de Júpiter y dos arcos conmemorativos. El foro era el centro cívico y comercial de Pompeya.
– La Basílica de Pompeya, uno de los edificios más antiguos e importantes, que junto con el Foro era la sede de la administración de justicia.
– El Templo de Apolo, situado frente a la basílica, en la zona de la Campania era muy difundido la veneración a este Dios. Se cree que también se le rendía culto a la diosa Diana y Mercurio. Pompeya cuenta también con más templos dedicados a Isis, Venus y otras divinidades.
– El Anfiteatro romano, construido en piedra y con capacidad para 20.000 espectadores. En la fachada había cuatro escaleras por las que se subía a las gradas superiores, a diferencia de otros anfiteatros romanos no cuenta con galerías subterráneas.
Además del anfiteatro, la ciudad de Pompeya tenía más edificios para espectáculos.
– Residencias privadas, como la Casa del Fauno, una de las más lujosas de la ciudad, la casa del Poeta Trágico, llamada así por un mosaico que representa a un instructor de actores de teatro, la Villa de los Misterios o la Casa de la Columna Etrusca.
– Instalaciones deportivas, edificios económicos y termas.
– El Jardín de los Fugitivos, donde se descubrieron los cuerpos de habitantes de Pompeya que intentaron huir durante la erupción del volcán, muriendo sepultados por las cenizas. Todavía se puede observar el terror en sus rostros.