Escalar el Monte Kilimanjaro
El Monte Kilimanjaro es una gigantesca montaña de África que se eleva a 5895 metros por sobre el nivel de mar. Se encuentra en el norte de Tanzania, cerca de su frontera con Kenia. Llegar hasta su cima puede ser la mayor de las aventuras.
El Monte Kilimanjaro
Se trata de la montaña más elevada de todo el continente africano. Y escalar hasta su cima es un desafío que ha seducido y seduce a muchos aventureros.
El majestuoso Monte Kilimanjaro no sólo impacta por sus casi 6000 metros de altura, si no por la sensación de soledad que infunde esa cima que se eleva imponente en la inmensa planicie denominada Estepa de los Masai.
El monte Kilimanjaro está compuesto de tres volcanes, Kibo, Mawenzi y Shira, ninguno de los cuales está hoy en actividad. Su cima principal es el pico Uhuru, que por su altitud se lo ve siempre cubierto de nieve – y es uno de esos contrastes del continente africano que deslumbra a quienes visitan sus cálidas tierras.
El ascenso al Kilimanjaro
Muchos viajeros y escaladores profesionales se lanzan a la aventura de escalar el Monte Kilimanjaro. Claro que, para llevar adelante semejante desafío se requiere de conocimientos, de equipamiento y de un estado atlético adecuado.
Se trata de una actividad muy exigente desde el punto de vista físico, ya que el terreno es escarpado y la altura y las inclemencias del clima se hacen sentir.
Existen diversas rutas de ascenso para elegir, rutas de diferente complejidad que se adaptan a los diversos conocimientos y aptitudes de los viajeros. Algunas, que implican escalada en hielo por ejemplo, sólo están reservados para los expertos.
En el camino hacia la cima se irán sucediendo, en unos pocos días, zonas con diferentes tipos de clima. A medida que se avanza se pasa de un ecosistema de sabana, a un bosque tropical, y luego a la tundra, hasta llegar a las árida rocas y las nieves cercanas a la cima.
El ascenso implica largas horas caminando, soportar frío y calor extremos, y probablemente también lluvia, viento, granizo y niebla.
Aunque, al llegar a la cima está la recompensa de contemplar la salida del sol desde la cumbre más alta de África. La posibilidad de observar desde la cumbre de Kibo, como los locales llaman al Monte Kilimanjaro, las vistas de la infinita planicie de sabana que lo rodea es un privilegio incomparable.
Como decíamos, no se trata de una aventura apta para todos los viajeros. Quienes no posean las destrezas físicas necesarias para tal proeza pueden aprovechar el Parque Nacional Kilimanjaro y las diversas actividades recreativas que ofrece.
El Parque Nacional Kilimanjaro
En el entorno de la Montaña se encuentra el Parque Nacional Kilimanjaro, una de las áreas protegidas más destacas de la República Unida de Tanzania.
Entre los numerosos y bellos parques nacionales que posee África, éste quizá sea el más famoso. Es un reservorio de flora y fauna que se extienden por un área de más de 75 mil hectáreas de montes y selvas. Allí, se protegen varias especies animales en peligro de extinción.
El parque fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1987. Anteriormente, desde 1921, tenía el estatus de reserva forestal, pero la región igualmente era utilizada como zona de caza, lo que ponía en peligro a varias especies.