Teatro La Scala, el teatro de ópera más famoso del mundo
La ciudad de Milán es conocida mundialmente como la capital de la moda, además es una ciudad con una gran cantidad de opciones respecto a actividades culturales y de ocio. Una de las razones por las cuales es tan visitada radica en su pequeño tamaño, puesto que garantiza las ventajas que ofrece una gran ciudad, con el añadido de que todos sus principales puntos de interés se pueden recorrer muy fácilmente a pie.
Milán es una ciudad que le ofrece al turista todas las opciones suficientes para pasar una buena estadía, puesto que si el visitante desea escapar del ruido de la ciudad, puede dirigirse hacia un lugar verde y fresco, donde se aleja de lo mundano. Asimismo, entre sus principales atractivos, se encuentran una espectacular catedral, un impresionante castillo, iglesias antiguas y, sobre todo, un imponente teatro conocido como La Scala.
El Teatro alla Scala
El Teatro alla Scala —también conocido como La Scala— es, junto a la Ópera de Viena, uno de los teatros de ópera más importantes y famosos del mundo. El admirable aspecto exterior que lo cobija se encarga de envolverlo en una belleza de antaño que sorprende a todos sus visitantes.
Historia de La Scala
En el año 1776 hubo un incendio cuya consecuencia directa fue la destrucción del antiguo Teatro Ducale, por tal razón el archiduque Fernando de Austria ordenó inmediatamente la construcción de un teatro nuevo. Este edificio sería construido donde se encontraba la Iglesia de Santa María alla Scala, por lo cual el teatro pasaría a tomar este nombre.
Durante la Segunda Guerra Mundial los bombardeos dañaron gravemente el teatro, suceso que lo llevaría a ser reconstruido tres años después. Finalmente en el año 2002 el teatro cerró sus puertas para pasar por un proceso de renovación que terminaría en el 2004, en este año se reinaguraría con la primera obra presentada en 1778, L’Europa Riconosciuta de Salieri.
En el teatro La Scala se han presentado importantes óperas en toda su historia, se destacan las de Otello y Nabuco de Verdi, o Madame Butterfly de Puccini.
El Museo del Teatro
El teatro La Scala —como es costumbre en los teatros antiguos— posee un completo museo compuesto por gran variedad de pinturas, trajes, bustos y demás elementos relacionados íntimamente con el mundo de la ópera.
El recorrido por este lugar incluye una visita al vestíbulo del teatro, un sitio espectacular y relajante, aunque con muy poca decoración. También se puede acceder a los palcos pequeños, los cuales cuentan con un revestimiento de terciopelo rojo; en estos lugares la nobleza y la gente de alta sociedad observaban absortas las obras, claro está que al día de hoy se continúa haciendo.
El recinto principal, realizado completamente de madera cubierta de terciopelo rojo, se encuentra decorado con estucos en tonos dorados. Asimismo, para coronar el escenario hay una enorme araña de cristal de Bohemia compuesta por más de 360 bombillas.
Un lugar imprescindible…
La visita al teatro La Scala resulta espectacular para cualquier persona, sin embargo para acceder a él se debe de asistir a una presentación o ir directamente al museo del teatro. De igual manera la visita al museo es realmente interesante, puesto que permite recorrer todos los lugares que componen al teatro, destacando principalmente al vestíbulo y el auditorio —el cual puede verse desde los pequeños palcos—.