Visitar Praga en el Año de Kafka
El pasado 3 de julio se cumplieron 130 años del nacimiento Franz Kafka en la capital Checa, por lo que visitar Praga en el Año de Kafka resultará un viaje aun más tentador para los admiradores de este gran escritor.
Franz Kafka nació en Praga en 1883, cuando esta ciudad estaba bajo el dominio del Imperio Autro-húngaro. Si bien la ciudad aparece de forma explícita en contadas ocasiones en la obra del gran escritor, es sin duda centro de su mundo literario. Con su magia y sus misterios, Praga siempre ronda las páginas de sus novelas llenas de metáforas y alegorías.
La ruta de Kafka por Praga
Los amantes de la literatura que visiten la capital Checa podrán seguir una ruta por Praga que los llevará por varios puntos relacionados con la vida y la obra de Kafka.
Su casa natal estaba ubicada en el número 5 de la calle U Radnice, en la esquina de las calles Maiselova y Kaprova, cerca de la Plaza de la Ciudad Vieja. Pero después de la renovación de Praga, realizada a comienzos del siglo XX, de la antigua casa quedó únicamente el portal de piedra original. Hoy solo hay allí una placa conmemorativa.
Entre los años 1889 y1896, la familia Kafka vivió en la Casa del Minuto, un edificio con una bella y particular decoración. El joven Franz estudiaba en el cercano instituto alemán del palacio Golz-Kinský. Su padre, Hermann Kafka, tan influyente en la vida del escritor, tenía entonces una mercería en la planta baja del mismo edificio.
Los Kafka se mudaban con frecuencia, pero lo hacían a otros domicilios que se encontraban a unas pocas calles de distancia, por lo que las huellas del escritor, los lugares donde vivió y escribió, se pueden encontrar agrupados en la Ciudad Vieja de Praga, y sobre todo, en los alrededores de la Plaza de la Ciudad Vieja.
El impresionante Castillo de Praga, el castillo gótico más grande del mundo, y una de las construcciones más emblemáticas de la capital de la República Checa, que da cuenta de su gran pasado histórico, inspiró la novela El Castillo, y también aparece en El Proceso.
Se dice que en La Callejuela del Oro, cercana al Castillo de Praga, en la diminuta casa del número 22, vivió Kafka compartiendo casa con su hermana. En realidad, la casa pertenecía a su hermana, y Kafka sólo la utilizaba a veces como lugar de refugio para concentrarse en la escritura, pero nunca vivió allí.
La Callejuela del Oro hoy es un sitio muy concurrido donde se venden los libros de Kafka y otros souvenirs relacionados con el escritor.
En 2003 se instaló en Praga el Monumento a Franz Kafka, una escultura del artista checo Jaroslav Róna.
Otras visitas obligadas en una recorrida por Praga en el Año de Kafka son, el barrio Malá Strana y el museo Franz Kafka. Este último abrió sus puertas al público en 2005, y en él se encontrará una exposición interactiva dedicada a las obras del escritor, y allí también se recoge el papel que la ciudad ejerció en su vida y en su obra.
En 1917 el escritor enfermó de tuberculosis, y luego pasó los últimos años de su vida en instituciones médicas de la República Checa y del extranjero. Murió, a los 40 años, en un sanatorio de Austria, dejando como legado una de la más importantes e influyentes obras de la historia de la literatura. Sus restos descansan en un panteón familiar en el Nuevo Cementerio Judío de Praga-Strašnice.