Recorrido por la región vinícola de Champaña, Francia
A veces ocurre que un producto que sale de una determinada región puede alcanzar tanta fama que “le roba” el nombre al lugar donde fue producido. Algo así es lo que ha ocurrido con la champaña, o champán, la fina bebida que todos asociamos con celebraciones y éxito, muchas veces olvidando que es en la histórica región vinícola de Champaña, Francia, donde se produce esta sofisticada bebida.
A continuación, hacemos un recorrido por la historia y los hermosos campos cultivados de vid en esta región del noreste francés.
La región vinícola de Champaña no debe confundirse con la región histórica de Champaña. La primera se limita básicamente a cinco distritos de producción de vino, principalmente en los valles de los ríos Vesle, Ardre, Marne, y las montañas de Reims; mientras que la segunda corresponde a un área más amplia, actualmente dentro de la región administrativa de Champaña-Ardenas.
La notoriedad de esta región para la producción de vino comenzó en la Edad Media, y se vio especialmente divulgada por el Papa Urbano II, originario del lugar, quien aseguraba que los vinos del área eran los mejores del mundo. Pronto, tanto papas como reyes empezaron a adquirir tierras en Champaña para dedicarlas a la producción vinícola.
Con el paso del tiempo, los productores de vino de la región empezaron a darse cuenta que lo mejor que podían hacer, para competir con otras regiones productoras de Francia y Europa, —especialmente Borgoña—, era especializarse en la producción de vino blanco, ya que las condiciones del terreno y de acidez eran las apropiadas para tal fin.
Todo parece indicar que el vino espumoso de Champaña fue hecho inicialmente de manera accidental, por monjes benedictinos en el siglo XVI. La nueva variedad de vino, sin embargo, no fue muy bien recibida en la región, y fueron los ingleses años más tarde quienes empezaron a degustar más la nueva variedad y a estudiar el proceso de fermentación. Ya en el siglo XIX, el consumo de champán se extendió a nivel mundial, y así es hasta nuestros días.
La región vinícola de Champaña está conformada principalmente por pueblos pequeños, dispersos entre los abundantes campos de cultivo, con la única excepción de Reims, la ciudad más grande de la región. Esta urbe se encuentra a unos 130 km de París, desde donde es posible llegar por medio de tren.
Como un lugar que representa de manera excelente la cultura francesa, incluida su producción de vino y su gastronomía, así como por sus hermosos y encantadores paisajes con sembradíos y pequeñas villas, Champaña es una región que no deberías perderte si te interesa hacer turismo en esta parte de Francia. Incluso si viajas a París, es relativamente fácil desplazarte hasta la región, así experimentarás lo que se siente viajar por una de las áreas agrícolas más hermosas de Europa, y también para que tengas bien presente, cuando te tomes una copa de champaña, el lugar de origen de esta fina bebida.