La Capilla Sixtina, una impresionante obra de arte mundialmente conocida
La Capilla Sixtina es una de las obras maestras del arte mundial. Es la capilla más famosa del Palacio Apostólico de la Ciudad del Vaticano y del mundo entero.
La estructura y decoración de la capilla evoca al Templo de Salomón del Antiguo Testamento, además es obra de los más grandes artistas de la historia como Miguel Ángel, Rafael Sanzio o Botticeli.
La Capilla Sixtina es la capilla de la Casa Pontificia pero es especialmente conocida por ser la sede de los cónclaves papales y donde se elige y corona al Papa.
Estructura y composición de la Capilla Sixtina
La Capilla Sixtina fue construida entre 1477 y 1480 por orden del Papa Sixto IV -que de ahí toma su nombre- para restaurar la antigua Capilla Magna en la Ciudad del Vativano en Roma.
Se trata de un edificio alto y rectangular hecho a base de ladrillos, llama la atención que en su exterior no hay ni un sólo adorno. Tampoco hay una fachada principal ni entradas exteriores, el acceso al lugar se realiza a través del interior del Palacio Apostólico.
Las medidas del interior de la Capilla tiene las dimensiones del Templo de Salomón del que habla el Antiguo Testamento, 40.9 metros de largo por 13.4 metros de ancho.
El techo de la Capilla Sixtina es una bóveda de cañón que está cortada en sentido transversal por pequeñas bóvedas.
El techo de la Capilla Sixtina
La bóveda de la Capilla Sixtina fue pintada por Miguel Ángel entre los años 1508 y 1512, se trata de un conjunto de frescos realizados para decorar la bóveda de la Capilla Sixtina. El tema que escogió el autor fue la Historia del Mundo y de la humanidad antes de la llegada de Cristo.
El techo está dividido en varias partes y entre las pinturas al fresco que podemos encontrar están las nueve historias del Génesis, que ocupan el área central de la bóveda y son las más atractivas para el visitante que quiere contemplar la maravillosa y grandiosa decoración de la Capilla Sixtina.
Las escenas del Génesis son : La Embriaguez de Noé, El Diluvio Universal, El Sacrificio de Noé, Caída del Hombre, Pecado Original y Expulsión del Paraíso, Creación de Eva, La Creación de Adán, Separación de las Aguas y la Tierra, Creación de los Astros y los Planetas y por último la Separación de la Luz de la Oscuridad.
La escena de La Creación de Adán es la más conocida de las imágenes de la bóveda.
El Juicio Final
Sobre el altar mayor y decorando el ábside de la Capilla Sixtina se encuentra otra de las más famosas obras de arte de Miguel Ángel, El Juicio Final, que representa el Apocalipsis de San Juan. Miguel Ángel comenzó a pintar este mural al fresco 25 años después de acabar de pintar la bóveda de la capilla.
Se trata de una escena algo caótica con numerosos personajes desnudos de gran tamaño y con una musculatura muy desarrollada. Las figuras aparecen como amontonadas y todas ellas en un primer plano, sin ninguna perspectiva.
Los colores usados para este fresco son muy vivos y el acabado busca contrastes de luz y sombra.
