Bratislava, Eslovaquia: belleza en el Danubio
La ciudad de Bratislava es una urbe fantástica en el centro de Europa. Su larga y rica historia se aprecia en los numerosos monumentos, mientras que su paisaje urbano se ve atrasado por el paso del río Danubio. Si te llaman la atención las ciudades alternativas en Europa, quizás no tan populares como otra metrópolis pero con su propio carácter y distinción, viajar a Bratislava puede convertirse en el viaje de tus sueños. Después de leer estas líneas, te darás cuenta que hay numerosas opciones para pasarla bien y aprender en esta ciudad de belleza innegable.
Bratislava es la capital de Eslovaquia, además de ser la ciudad más grande de ese país. El núcleo urbano de Bratislava se abre al paso del río Danubio, que divide a la ciudad en una parte norte-este, donde se encuentra el distrito histórico, y una parte sur-oeste, cercana a la frontera con Austria. El turismo en esta ciudad se ha visto favorecido por los vuelos baratos que arriban al sitio, con aerolíneas de bajo costo como Ryanair.
La riqueza arquitectónica de Bratislava
Un atractivo indiscutible de este núcleo urbano es la abundancia de edificios históricos, la mayoría muy bien preservados, como el propio castillo de Bratislava. En el barrio histórico sobresale la catedral de San Martín, ubicada a los pies de la colina sobre la que se encuentra el castillo de Bratislava. Esta modesta pero hermosa catedral fue consagrada a mediados del siglo XV y presenta un encantador estilo gótico. La torre del templo es uno de los puntos más sobresalientes del distrito histórico y de toda la ciudad.
El palacio Mirbach, en su hermoso estilo rococó, es una de las edificaciones más distinguidas de la ciudad. Fue construido entre 1768 y 1770, y en este se pueden encontrar exhibiciones de pintura y arquitectura, especialmente del movimiento barroco de Eslovaquia y los países vecinos.
La iglesia Franciscana es otra de las edificaciones más estimadas por los habitantes de Eslovaquia, ya que es oficialmente el edificio religioso más antiguo de la ciudad. Debido a que el templo has sido afectado por terremotos e incendios a través de los siglos, gran parte de este ha sido reconstruida, aunque todavía se conserva una parte de su estilo original. La iglesia fue consagrada en el año 1297.
No puede faltar una visita al espectacular Teatro Nacional Eslovaco, el cual se compone de un edificio de estilo neo renacentista, construido entre 1885 y 1886; así como de una instalación de estilo contemporáneo, que se empezó a construir en 1986 y que fue inaugurada hasta el año 2007.
El Museo Nacional Eslovaco tiene un fenomenal edificio que se encuentra a orillas del río Danubio, construido entre 1925 y 1928. La institución que alberga la edificación, un museo que hoy se dedica a la investigación científica, fue inaugurada en 1930.
La plaza Principal, ubicada en el centro del distrito histórico, está rodeada de monumentos de suma belleza. Allí se puede admirar el Ayuntamiento de la Ciudad Vieja, un conjunto de edificios de diferentes estilos arquitectónicos, como el barroco y neogótico. Actualmente, el Ayuntamiento de la ciudad vieja alberga el Museo de la Ciudad de Bratislava.
Bratislava es una ciudad de rica historia. Como turista, quedarás encantado con toda esta abundancia de atracciones para ser conocer y deleitarse.