Las estaciones de tren más hermosas del mundo 2° Parte

Las estaciones de tren más hermosas del mundo 2° Parte

Última actualización: 23 enero, 2015

Continuamos con el repaso por algunas de las estaciones de tren más hermosas del mundo. En esta ocasión nos ocuparemos de las estaciones de Oporto, de Londres y Tokio.

1 Estación de St. Pancras de Londres

St. Pancras es una pintoresca estación de trenes construida en 1868 para conectar  Londres con la parte este de Inglaterra. Está situada en el norte de la capital británica, cerca del edificio de la nueva Biblioteca Británica.

La estación de por sí posee grandes dimensiones, además al edificio principal, en 1873 se le unió un hotel, el Midland Grand Hotel, el cual estuvo en funcionamiento hasta 1935. Desde esa fecha el hotel permaneció cerrado hasta 2011 cuando un nuevo proyecto lo recuperó y las instalaciones contiguas a la estación volvieron a con el nombre de St. Pancras Renaissance London Hotel.

Antes de ello, en 2007, se finalizó una importante serie de cambios en el aspecto y el funcionamiento de la estación St. Pancras. Remodelación de la estación simultánea a la construcción del CTRL (Channel Tunnel Rail Link), una línea de alta velocidad que une Londres con el Eurotúnel.

Con las reformas hechas al edificio de la estación se transformó en la terminal londinense que centraliza de los servicios ferroviarios de alta velocidad. Hoy, es el principal punto de partida desde Londres hacia la región de East Midlands y desde allí parten los trenes de alta velocidad Eurostar.

Como parte de la reforma de la estación St. Pancras se incluyó una obra del reconocido artista británico Paul Day, quien diseñó una escultura de nueve metros de altura que retrata a una pareja de jóvenes besándose, como símbolo del encuentro entre las personas.

2 Estación de Porto de São Bento de Oporto

Estación de Porto de São Bento de Oporto

La estación de Porto de São Bento de Oporto indudablemente se distingue por los 20.000 delicados azulejos color azul y blanco que adornan sus paredes.

Sao Bento se empezó a construir en 1900, cuando se comenzaba a extender el sistema ferroviario en Portugal, en el lugar donde estaba emplazado el Convento de São Bento del Ave María, y de allí fue que tomó su nombre.

Aunque el arquitecto responsable de la construcción de la estación fue José Porto, Marques da Silva, fue el pintor Jorge Colaço, máximo exponente de la azulejería portuguesa, quien pintó los famosos paneles, el rasgo distintivo de esta estación de trenes. Los azulejos representan escenas vinculados a la fundación y la historia de Oporto.

En 1916 la estación Porto de São Bento de Oporto fue inaugurada oficialmente, desde entonces millones de pasajeros han pasado por sus andenes. En la actualidad, la estación está en pleno funcionamiento y sirve de nexo para llegar a la ciudad del Duero, así como para trasladarse a localidades como Coimbra, Braga y Guimarães.

Para los turistas que visitan o pasan por Oporto, cualquier excusa les será buena para acercarse a la estación y deleitarse observando los maravillosos azulejos que adornan las paredes. Quienes la han visitado, aseguran que al atardecer, cuando los rayos de sol entran por los arcos de la estación, los azulejos de Porto de São Bento adquieren ciertos brillos verdaderamente mágicos.

3 Estación Marunouchi de Tokio

Estación Marunouchi de Tokio

Hoy la estación Marunouchi de Tokio se yergue imponente con su particular estilo occidental cerca del Palacio Imperial y del concurrido barrio de Ginza de la capital japonesa.

En 1908 comenzó la construcción de esta estación de trenes, con un diseño del arquitecto Tatsuno Kingo, un apasionado por el estilo occidental. La obra fue inaugurada en 1914, pero luego, durante la Segunda Guerra Mundial, la estación sufrió severos daños y debió ser reconstruida. Entonces se realizaron importantes reformas, entre ellas sustituir sus célebres cúpulas por un tejado a dos aguas.

A eso se suma las reformas mucho más importantes comenzadas en 2007 y finalizadas en 2012. Estas reformas estuvieron orientadas a restaurar el edificio Marunouchi de la estación de Tokio y recuperar el aspecto que poseía la estación de Tokio 100 años atrás. Con las obras realizadas se procuró reproducir el aspecto exterior original del edificio, acondicionarlo para nuevas funciones y adecuarlo para resistir posibles terremotos.

En 2012 además del edificio Marunouchi de la estación, se inauguraron otras obras como el Tokyo Station Hotel y la Tokyo Station Gallery. Así, hoy en día, en el entorno de la estación de Tokio se han instalado varios centros comerciales y tiendas, transformando  sustancialmente el barrio.

La belleza del edificio Marunouchi restaurado, así como su atractivo entorno, ha convertido a la estación de Tokio más que en un punto de tránsito durante un viaje, en un sitio a visitar para el turista.

Imágenes cortesía de nan palmero, TurismoenPortugal y Yuya Sekiguchi.