Botiquín de primeros auxilios y consejos útiles para viajar precabidos

Botiquín de primeros auxilios y consejos útiles para viajar precabidos

Última actualización: 23 enero, 2015

Hace poco hablamos de la seguridad a la hora de viajar refiriéndonos a los países considerados más peligrosos. Hoy halaremos de la seguridad desde el punto de vista de estar preparados para cualquier percance de salud que puede ocurrirnos a nosotros o a quienes nos acompañan en el viaje.

Todo viaje trae aparejado cierto riesgo, ya sea que viajemos a gran ciudad o a un destino inhóspito para practicar algo de turismo aventura. Lo cierto es que al salir siempre puede suceder algo inesperado, desde un accidente a un ataque de asma. A continuación les ofrecemos algunas recomendaciones útiles para viajar prevenidos.

Nada como un buen seguro médico para viajar

Lo más recomendable es viajar con un seguro médico de los tantos que hay en el mercado de la salud. Existen seguros especiales para viajeros, que varían en sus precios según el tipo de cobertura que ofrezcan y la calidad de la misma.

Claro que, estos seguros están pensado para brindar asistencia médica en instalacioes de ciudades y centros poblados. Sin embargo, si ocurre algo en un lugar apartado o por cualquier razón no nos es posible acceder a un centro hospitalario siempre es bueno llevar un kit de primeros auxilios al viajar y tener algunas nociones de cómo actuar en determinadas emergencias.

Qué llevar en un botiquín de primeros auxilios al emprender un viaje

A continuación les damos una lista de los elementos que se deben incluir en ese kit o botiquín de primeros auxilios – más allá de que lo que se incluya dependerá de quiénes viajen y de las particularidades del destino – hay elementos esenciales que se deben llevar:

– Analgésicos: como Ibuprofeno o Paracetamol, útiles para calmar desde un dolor de cabeza hasta un insoportable esguince.
– Antisépticos para prevenir las infecciones en caso de heridas, tales como: Isodine, Prepodyne, agua oxigenada o simplemente jabón.
– Material de curación como vendajes, apósitos, vendas, algodón, es algo esencial en un kit de primeros auxilios, que se debe saber utilizar para detener las hemorragias, limpiar y cubrir heridas.
– Antihistamínicos para tratar las alergias e inflamaciones que pueden producir la picadura de un insecto.
– Cremas hidratante para quemaduras en la piel, sobre todo si se va a estar expuesto mucho tiempo al sol.

También pueden ser útiles las toallitas antisépticas, prácticas para desinfectar las heridas y limpiarse las manos, así como pinzas, tijeras, termómetro y otros utensillos.

Qué llevar en un botiquín de primeros auxilios al emprender un viaje

Otros elementos menos importantes pero de uso más probable son:

– Medicamentos para el resfriado o la gripe.
– Medicamentos para el mareo y las náuseas producidas por la altura.
– Antiácidos, pastillas para el hígado y las molestias estomacales.
– Además, claro está, se deben llevar los medicamentos de uso habitual según las patologías de cada persona. En determinados casos es conveniente hablar con el médico del viaje, quien puede hacer diversas recomendaciones y advertencias, desde las vacunas que deberá tener para viajar a ciertos países (zonas selváticas y montañosas en especial) hasta los medicamentos que puede necesitar un niño.

Más tips para un viaje seguro

– Llevar en la billetera una ficha personal con datos como el tipo de sangre, a qué se es alérgico y las enfermedades que padece o ha padecido, así como todo lo que pueda llegar a  ser útil en caso de que un médico deba atenderle de emergencia.
– Al llegar a destino averiguar el número telefónico del Sistema de Emergencias Médicas local y guardarlo en un lugar que esté siempre al alcance de la mano.
– Llevar consigo la dirección del hotel o el lugar donde se esté alojando. Una llamada a ese lugar puede ser de mucha ayuda para que un amigo o familiar vaya en su auxilio.

Accidentes en un viaje

En caso de viajar con personas, amigos o familiares, con enfermedades como diabetes, epilepsia u otras, que pueden sufrir ataques o descompensaciones repentinas, procurar informarse al respecto – preguntándole a sus amigos, por ejemplo, quienes le indicarán cómo actuar en esas situaciones.

En resumen, un seguro médico, un botiquín (que no incluya elementos de menos ni de más), e información, son los mejores aliados para un viaje menos complicado.

Imágenes de Daquella, Mat Honan, USAG-Humphreys.